
- Invertir en energía eólica y solar, así como en otras energías renovables, para reducir al mínimo la quema de combustibles fósiles, que provocan una fuerte contaminación atmosférica.
- Anima a tu familia a utilizar medios de transporte alternativos, como el tren o la bicicleta.
- Utiliza la energía (agua, hervidor, leña) con prudencia.
- Recicla y reutiliza. Esto minimizará la dependencia de producir cosas nuevas. Recuerda que las industrias manufactureras crean mucha contaminación, así que si podemos reutilizar cosas como las bolsas de plástico de la compra, la ropa, el papel y las botellas, puede ayudar.
- Utiliza productos menos tóxicos, por ejemplo para limpiar la casa, pintar, lavar la ropa o tratar con animales domésticos o malas hierbas.
- Compra localmente para reducir el consumo de energía y la contaminación producida por el transporte de los productos.
- Alza la voz por un aire limpio. Informa a tu familia, amigos y compañeros de trabajo sobre la importancia del aire limpio.